sábado, 28 de junio de 2014

Balarés, una mirada al horizonte

Hacía unos cuantos años que no visitaba Balarés y como me suponía casi nada ha cambiado.
El mirador del Monte Blanco es un sitio estratégico para ver la desembocadura del Río Anllóns y al mismo tiempo disfrutar de las vistas de la Ría de Corme y Laxe.



Tengo una foto en este mismo lugar hace trece años y aunque parezca increíble el lugar no ha cambiado nada.

Saliendo del mirador y girando a la izquierda seguimos la carretera hasta llegar a la Playa de Balarés, muy conocida por su saturado merendero y por su arena blanca. Y tengo que decir que es una de las playas con el agua más fría que he probado.




La playa consta de un pequeño embarcadero, donde durante la segunda guerra mundial se cargaba wolframio.


No es un sitio que realmente te impresione, pero sí que te deja un buen recuerdo y es un buen lugar para hacer una comida playera.